Los cenotes son formaciones producidas a raíz de las lluvias e inundaciones a los largo de muchos años que, al combinar agua y ácido carbónico dieron lugar a pasajes subterráneos, utilizados por los mayas para sus rituales, de los cuales aún se encuentran vestigios hoy en día.
Si visita la Riviera Maya, no puede pasar por alto la mágica travesía de visitar los cenotes más importantes del área, en los que podrá esnorquelear o bucear en medio de estalactitas o estalagmitas de miles de años de antigüedad, con una visibilidad tan clara que sentirá estar explorando una dimensión desconocida. No necesita ser un buzo experto para sumergirse en uno de estos “pozos sagrados”, pues cuentan con una profundidad de 5 a 10 metros, ideal para principiantes. La Península de Yucatán es el único lugar del mundo con este tipo de formaciones naturales, actualmente se han detectado unos 3,000 cenotes, de los cuales sólo 1,400 han sido registrados y el resto aún permanecen inexplorados. En el corredor turístico de la Riviera Maya podrá encontrar fácil acceso a una diversidad de cenotes o ríos subterráneos de características distintas. Algunos están exclusivamente bajo tierra mientras que otros guardan las características de una laguna pues están al aire libre.
Entre la infinidad de cenotes que abundan en esta región podemos mencionar algunos de singular belleza como el Dos Ojos, Orquídea, Gran Cenote, Cristal o el Escondido. No debe preocuparle el no saber nadar pues en algunos penden unas sogas de lado a lado para poder sujetarse y disfrutar así de tan espectacular experiencia.
Actualmente los pobladores de la región, siguen considerando sagrados a los cenotes, hecho que resalta en una tradición popular que dice que los turistas que regresen a este lugar serán aquellos que hayan bebido el agua de un cenote. Por si acaso, no deje de tomar un sorbo de tan fresca agua, ¡esto le asegurará su pasaje de regreso!
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Cenotes: Paraísos Sagrados
- Autor:
- Paula Camera